COMPARATIVA ENTRE EL SISTEMA EDUCATIVO ESPAÑOL Y EL BRITÁNICO
Los dos sistemas educativos muestran claras diferencias. En rasgos generales, el presupuesto global invertido en educación en Reino Unido es notoriamente más alto en comparación con el que se invierte en España (13,8% frente a 9,8%). Otro aspecto relevante es el gasto per capita el cual en Reino Unido se encuentra en torno a los 2035 euros mientras que en España es de unos 1009 euros.
En lo que se refiere a las leyes educativas es de destacar que, en la actualidad, sigue vigente en Reino Unido la ley educativa propuesta en 1988 con un enfoque eminentemente práctico y no político; si bien es cierto que esta ley educativa ha experimentado ligeras modificaciones pero en esencia siempre ha sido la misma. Esto claramente contrasta con el gran número de leyes educativas propuestas en España las cuales se centran principalmente en aspectos políticos y en las ideologías de los diferentes partidos. En este sentido el sistema británico supera con creces al español ya que la educación no se debe ver influenciada por las ideologías de los partidos políticos. Es fundamental el establecimiento de una serie de criterios mínimos que sean elaborados por profesionales de la educación dejando al margen su ideología política.
Conviene señalar que el hecho de permitir a los estudiantes un mayor desarrollo de sus capacidades prácticas es fundamental ya que esto les permite tener más herramientas de cara a la toma de decisiones. El sistema español fomenta un claro aprendizaje memorístico basado en la asimilación de un gran número de conceptos los cuales luego deben saber expresar en un examen teórico.
Otro aspecto a destacar del sistema británico es que conceden una gran importancia al esfuerzo y la constancia, cualidades que muchas veces no se valoran como se debiera en el modelo español. En efecto, en éste muchas veces se valoran más los aspectos negativos que los positivos. Esto es una consecuencia más que clara de que los jóvenes no vayan motivados a la escuela y eso se traduzca en menos ganas de aprender y, por tanto, mayor posibilidad de abandono escolar temprano.
Otro punto a señalar del modelo británico es la diversificación por niveles y capacidades haciendo que la enseñanza se convierta en algo individualizado y acorde a las habilidades del estudiante. Tal diversificación en España no existe y, en repetidas ocasiones, se lleva a cabo un trato de iguales entre personas con intereses y capacidades muy dispares. Conviene destacar que el sistema educativo británico apuesta por la notable reducción del número de alumnos por aula, lo cual resulta muy ventajoso de cara a las necesidades individuales de cada alumno.
Un aspecto que ambos modelos tratan de fomentar en la mayor medida de lo posible es el trabajo en equipo el cual posee enormes beneficios ya que la coordinación en equipo con otras personas muy diferentes a ti es una valiosa herramienta para lograr un mayor éxito en una futura vida como profesional.
También conviene señalar que el modelo británico apuesta por el trabajo por objetivos del cual España no está del todo concienciado. Gracias a este trabajo aumentan la motivación y las ganas de aprender del estudiante y no se limita simplemente a ir a clase a estar sentado durante una larga jornada sin tener ninguna inspiración que le anime a alcanzar sus objetivos.
Por último, otra de las características interesantes del sistema británico es que propone no emplear libros lo cual puede resultar muy ventajoso de cara a la salud física y a la economía de las familias británicas (aunque algunos artículos que he leído dicen que un año académico en Reino Unido es significativamente más caro que en España). Esto, evidentemente, aún no ha llegado a España y los escolares se ven obligados a cargar con enormes mochilas llenas de libros de las asignaturas que tienen a diario.
Como conclusión final, el modelo educativo británico es, con diferencia, bastante más constructivo que el modelo español en términos de motivación, aprendizaje y desarrollo personal de los estudiantes. Confío que, con el tiempo, España se vaya empapando de todos estos aspectos positivos que ofrecen modelos de educación como el británico y apueste por una educación, en esencia, más práctica y menos teórica, en la cual los alumnos sean protagonistas y se sientan motivados y con ganas de divertirse aprendiendo.
A continuación os dejo un par de enlaces con información de interés:
https://datosmacro.expansion.com/estado/gasto/educacion
¡Hasta la próxima entrada!🌹🌹🌹
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